Para ser buenos administradores debemos cambiar nuestra forma de pensar, si somos nuevas criaturas en Cristo Jesús entonces creemos nosotros que no somos de este mundo, entonces conforme a esto nuestra forma de pensar debe ser:
Primero.- Pensar siempre que Cristo ha padecido por nosotros en la carne, ya que el venció al pecado, borrando todos nuestros pecados clavados en la cruz del calvario. (1Pedro 4:1) "Puesto que Cristo ha padecido por nosotros en la carne, vosotros también armaos del mismo pensamiento; pues quien ha padecido en la carne, terminó con el pecado"
Segundo.- Para no vivir el resto de nuestras vidas aquí en la tierra y no caer en pecado debemos siempre hacer TODAS nuestras acciones conforme la VOLUNTAD DE DIOS. (1 Pedro 4:2) "Para no vivir el tiempo que resta en la carne, conforme a las concupiscencias de los hombres, sino conforme a la voluntad de Dios."
Sabemos hermanos que el fin se acerca y el Apóstol Pedro nos indica y nos dice que debemos ser SOBRIOS Y VELAR EN ORACIÓN. Sobre todas las cosas siempre actuemos con AMOR ya que dice que es el único que puede cubrir multitud de nuestros pecados. (1 Pedro 4:7-8) " Mas el fin de todas las cosas se acerca; sed, pues, sobrios, y velad en oración. Y ante todo, tened entre vosotros ferviente amor; porque el amor cubrirá multitud de pecados."
Utilicemos el don que Dios nos ha dado a cada uno y ministremos conforme al poder de Dios nos da y siempre todo lo que hagamos sea Dios glorificado por Jesucristo. (1 Pedro 4:10-11) "Cada uno según el don que ha recibido, ministren a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios.Si alguno habla, hable conforme a las palabras de Dios; si alguno ministra, ministre conforme al poder que Dios da, para que en todo sea Dios glorificado por Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el imperio por los siglos de los siglos. Amén."
Me quedo con este versículo: "Desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación"(1 Pedro 2:2)
GLORIA A TI SEÑOR!
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